La Mediana Edad es una
etapa de la vida que no se puede demarcar cronológicamente, a pesar de lo cuál
la podemos situar alrededor de los 45 a los 60 años. Es un momento de la vida,
donde por lo general, los hijos ya son adolescentes, los propios padres son
grandes y hay cierta estabilidad laboral. Implica asumir nuevas posiciones
frente a la vida, tanto en hombres como en mujeres. La persona se enfrenta a
cambios biológicos y también psíquicos.
Entre los cambios
biológicos nos encontramos con que el cuerpo cambia sin permiso y con la
menopausia en la mujer, lo que implica que se acaba la posibilidad de procrear
y la andropausia en el hombre. Los cambios psíquicos más importantes son la
depresión, el insomnio, síntomas psicosomáticos. Hay cuatro características
intrapsíquicas que se dan en todas las personas al llegar a la Mediana Edad:
1- Incremento de la
interioridad: es un proceso en el cual la persona saca las catexias del mundo
exterior y se vuelve sobre sí misma. Se sumerge en su interior y se comienza a
replantear las posiciones que ha venido ocupando hasta ese momento en su vida.
Este replanteo, luego, en la vejez va a tener dos salidas posibles: La
reminiscencia, es decir recordar con un tinte de placer, quedando del lado de
la salud mental, o, la nostalgia, es decir, recordar don dolor, como si todo lo
pasado fue lo bueno y ya no queda nada por hacer, quedando así del lado más
cercano a la patología.
2- Cambio en la
percepción del paso del tiempo: es difícil que uno mismo se dé cuenta del paso
de los años en uno. Generalmente es el otro el que nos sirve de espejo. Es
clásico el ejemplo de dos amigos que se encuentran después de muchos años. Uno
lo encuentra viejo, pero, inmediatamente, se pregunta cómo el otro lo
encontrará a uno. Con lo cuál hay un cambio en la direccionalidad del tiempo,
porque ya no se cuentan tanto los años que nos quedan por vivir sino los que
nos faltan.
3-Personalización de la
muerte: La muerte pasa de ser una cuestión de los otros a una propia, a partir
de la muerte de los propios padres, de amigos. La Mediana Edad es la etapa de
la vida donde este tema está más presente, aún más que en la vejez. Por eso son
tan frecuentes las consultas médicas y se suele recurrir a las cirugías
estéticas, al consumo de drogas o alcohol, como modo de tapar el paso del
tiempo que, muchas veces, duele.
4-Trascendencia: Al
tomar conciencia que el tiempo es finito surge la necesidad de transmitir los
valores significativos no sólo a los herederos biológicos sino también a los
sociales, sería algo así como pasar la posta a las generaciones que vienen.
Hasta aquí he expuesto
cómo son los fenómenos que se presentan en esta etapa de la vida. Pero, lo que
hay que tener en cuenta es que esta etapa no es sinónimo de crisis, sino que se
trata de un hecho esperable y expectable y, por lo tanto, se puede elaborar, se
lo puede prevenir, la persona puede anticiparse y pensar que esta etapa va a
llegar, si tenemos suerte, y puede pensar en lo bueno que puede aportarle.
Nuevos proyectos, continuar los que quedaron pendientes, retomar amistades,
viajes y tantas otras cosas que en otro momento de la vida no se pudieron
hacer. En definitiva, la mediana edad puede vivirse como un nicho ecológico, o
como dice el médico y psicoanalista Leopoldo Salvarezza como la flor de la
vida.
Nuestra tarea, como
consultores psicológicos, será lograr que la persona que atraviesa este momento
de la vida tome conciencia de esta última posibilidad.
Viviana Albamonte
Consultora Psicológica
(Counselor)
quiero saber como puedo ayudar a mi novia a superar esa crisis, y cómo debo tratarla
ResponderEliminargracias